Organización armario
La organización es fundamental para cambiar los hábitos y mejorar nuestra vida. Y sé que estarás pensando ¿en qué?
Creo que a todos nos pasa ir por las mañanas al armario y ver todo en montones, saber lo que tenemos y sobre todo no saber qué ponernos y decimos la típica frase: “¡no tengo ropa!”
La cuestión no es si tenemos ropa o no, sino que visualmente no la vemos y eso nos genera estrés, agobio… el desorden no es una buena manera de comenzar el día.
En los últimos años se ha puesto de moda el método Konmari, quizá ya lo conozcas, con su libro “La magia del orden”. Te recomiendo que leas este libro, y no hace falta que luego lo hagas todo a raja tabla, pero te puede dar muchas ideas para tener tu espacio bien ordenado y tener esa sensación de paz.
A continuación, te comparto algunas pautas básicas para comenzar con la limpieza. Sé que es algo que nos da muchísima pereza y lo solemos dejar para otro momento, ya que es algo que no se ve si no abrimos las puertas. Pero la realidad es que, en nuestro interior sabemos cómo está y suele ser algo que no nos deja avanzar.
- Lo primero que tienes que hacer es sacar todo lo que tienes en el armario (todo), es muy importante ver todo lo que hay; también lo que tienes guardado en otras habitaciones. Da bastante pereza, no lo vamos a negar, pero… ¿cómo sabremos qué tirar si no ves todo lo que tienes?
- Elimina todo lo que no necesites, esté roto o hace años que no lo utilices. Puedes donar la ropa, regalarla o incluso venderla.
- Compra cajas, perchas... almacenaje que necesitarás para que todo esté en su sitio.
- Puedes organizar por estaciones y el resto guárdalo en cajas. Así cada seis meses tendrás que realizar la limpieza por obligación y eso te ayudará a mantener el orden.
- Doblar la ropa, según Konmari. Cada prenda tiene un tipo diferente de doblado y así se optimiza más el espacio. Estos métodos los puedes ver en videos en YouTube o en su libro, que lo explica muy bien.
Esperamos que con estas pequeñas pautas te animes a organizar una parte de tu vida. ¿y si comenzamos por la habitación y hacemos el resto de la casa?
Te animamos a comenzar con el cambio.